La comunicadora Altagracia Salazar puso en duda el impacto real que pueda tener el encuentro convocado por el presidente Luis Abinader con los exmandatarios Hipólito Mejía, Leonel Fernández y Danilo Medina para tratar la crisis de haití. Aunque reconoció que el tema ocupa la agenda mediática, advirtió que la expectativa generada podría no corresponderse con los resultados.

“Elucubrar sobre esta reunión es una pérdida de tiempo, porque hasta que no ocurra y se anuncien los resultados no habrá nada concreto que decir”, afirmó Salazar en su espacio matutino, haciendo alusión a la tendencia del debate público dominicano de especular sin fundamentos. En tono crítico, recordó que la sede del encuentro fue trasladada del Palacio Nacional al Ministerio de Defensa, aparentemente por exigencia de Danilo Medina, quien se negó a asistir a la Casa de Gobierno.

Salazar ironizó sobre la comodidad que sienten los líderes políticos en espacios castrenses y anticipó que el país se pasará varios días discutiendo sobre una reunión cuyo efecto real aún es incierto: “La crisis haitiana es real, pero uno no sabe cuánto puede cambiar por una reunión de expresidentes dominicanos”.

Situación migratoria en RD

La situación migratoria en la República Dominicana con respecto a los nacionales haitianos indocumentados ha sido un tema constante de preocupación y debate en los últimos años. La cercanía geográfica entre ambos países y la crisis política, económica y social que atraviesa Haití han generado un flujo migratorio irregular hacia la República Dominicana. Muchos ciudadanos haitianos han llegado al país en busca de mejores oportunidades de vida, sin contar con los documentos necesarios para regularizar su estatus migratorio, lo que ha llevado a un aumento significativo de la población haitiana indocumentada en diversas regiones del territorio dominicano.

El gobierno dominicano ha implementado diversas medidas para controlar y regular la migración, especialmente en lo que respecta a los haitianos indocumentados. A través de la Dirección General de Migración y el apoyo de las Fuerzas Armadas, se han realizado operativos de control migratorio para identificar a los inmigrantes sin papeles y, en muchos casos, repatriarlos a Haití. A pesar de estos esfuerzos, la situación persiste debido a factores como la falta de recursos en las instituciones migratorias, la complejidad de la tarea de regularizar a una población tan numerosa y la continua llegada de haitianos que cruzan la frontera de manera ilegal.

Este problema también ha generado tensiones sociales y políticas en el país. Mientras algunos sectores defienden los derechos humanos de los inmigrantes haitianos y piden su integración y regularización, otros consideran que la migración ilegal representa una carga para los servicios públicos y la seguridad del país. Además, el tema ha sido aprovechado en ocasiones por actores políticos para movilizar a la opinión pública en relación con la seguridad nacional y la soberanía territorial. La situación migratoria de los haitianos indocumentados en la República Dominicana sigue siendo un desafío que requiere una solución integral, que considere tanto las necesidades de los migrantes como la seguridad y estabilidad del país.