Un hombre ha denunciado la muerte de su hija embarazada y su bebé, atribuyendo esta tragedia a una presunta mala práctica y negligencia por parte del personal médico del hospital público en Santiago. Según el relato del padre, Julissa Martes Aybar, fue ingresada al quirófano desde temprano en la mañana, pero la situación empeoró, prolongándose durante horas hasta resultar en la pérdida tanto de su hija como de su bebé.
Los familiares de la víctima han señalado a la institución como un “matadero”, acusándola de una atención deficiente y de irregularidades graves en el manejo del caso. La familia de Julissa responsabiliza directamente al equipo médico del hospital por la muerte de la joven y su bebé. Alegan que los profesionales ignoraron las indicaciones de realizar la cesárea y optaron por un enfoque que habría sido inapropiado para las condiciones de la paciente.
Además, los familiares afirman que los nombres de algunos médicos registrados en los documentos entregados son falsos, lo que ha despertado aún más sospechas sobre posibles intentos de encubrir los hechos. Según los testimonios, la madre de la joven descubrió la tragedia al forzar la entrada a una sala cerrada, donde encontró el cadáver de su hija. Posteriormente, los cuerpos fueron trasladados a un “cuarto frío”, lo que incrementó la desconfianza de los familiares respecto al manejo del caso.
La familia exige una investigación exhaustiva y medidas contundentes para responsabilizar a quienes consideran responsables de este lamentable suceso.