En una emotiva ceremonia celebrada en el Ministerio de Defensa, el programa de reeducación de Hogar Crea conmemoró su 50 aniversario con la graduación de 500 ciudadanos que completaron exitosamente su proceso de tratamiento residencial. Este logro marca un hito en la labor de rehabilitación y reinserción social de personas que han superado la adicción a las drogas, ofreciendo una nueva oportunidad de vida y transformación.
El acto estuvo encabezado por Juan Agustín Molina, presidente de Hogar Crea, y Pablo Ulloa, titular de la Defensoría del Pueblo, quienes destacaron la importancia del amor, el apoyo familiar y el compromiso con Cristo en el proceso de reinserción. “Su entrega y dedicación son esenciales en el proceso de transformación de tantas vidas. Hoy se gradúan con una nueva visión, con nuevas herramientas y con una fuerza interior que nadie les puede quitar”, expresó Molina durante su discurso.
Los graduandos, acompañados de sus familias, celebraron el cierre de una etapa difícil y la apertura de una nueva oportunidad para un futuro libre de las malas prácticas. Muchos de ellos, como Tania Reyes, quien luchó durante más de 15 años con la adicción a la cocaína, compartieron su experiencia de superación. Tania, quien había sufrido graves daños en sus vías respiratorias debido a su adicción, destacó cómo la metodología de reeducación de Hogar Crea, basada en el trabajo de sicólogos, médicos y psiquiatras, le permitió reencontrarse con la persona que era antes de caer en la toxicomanía.
Los graduados ahora pasarán a un programa de seguimiento que busca garantizar su continuidad en el proceso de rehabilitación y mantenerlos alejados de las adicciones. Durante la ceremonia, los participantes compartieron sus historias de lucha y esperanza, reafirmando su compromiso de no repetir los errores del pasado.
El evento fue una celebración de resiliencia y cambio, resaltando la importancia de la reintegración social y la lucha constante contra la dependencia de sustancias.
