La Oficina de Servicios de Atención Permanente del Distrito Nacional dictó 18 meses de prisión preventiva contra siete acusados de integrar una red criminal que sustrajo más de 900,000 municiones del arsenal de la Policía Nacional. La operación, denominada Pandora, reveló la magnitud del delito que involucró a altos mandos policiales y agentes.

Líder de la red y otros implicados

La jueza Fátima Veloz impuso la medida de coerción al coronel Narciso Antonio Félix Romero, señalado como el líder de la presunta red. Según la acusación, Félix Romero habría orquestado el robo de municiones valoradas en casi 65 millones de pesos, traicionando la confianza depositada en su uniforme y su institución.

Otros oficiales de alto rango enviados a prisión son los capitanes Juan Miguel Pérez Soler y Nelson Valdés, junto al segundo teniente Marino Antonio Rodríguez Toribio. También se incluyen en la lista el cabo Juan Luis Díaz Medina, y los rasos Rubiel Martínez, alias Escobar, y Morelin Medina Pérez. Todos cumplirán la medida en el Centro de Operaciones Especiales.

Decisiones adicionales y alegatos

Por su cooperación con la Fiscalía, la única mujer y civil involucrada, Miguelina Bello Segura, recibió arresto domiciliario en Pedernales. En tanto, al capitán Víctor Manuel Santos, acusado de manipular auditorías para encubrir el robo, se le impuso una garantía económica de 3 millones de pesos y medidas restrictivas. De manera similar, el sargento mayor Miguel Ángel Gómez Espalliat deberá pagar 2 millones de pesos como fianza.

El abogado defensor de Morelin Medina Pérez calificó la decisión como “arbitraria” y anticipó que presentará un recurso de apelación:

“Cuando los procesos tienen tanta exposición mediática, las decisiones tienden a ser desfavorables para los imputados”, señaló.

Caso declarado complejo

El tribunal declaró la complejidad del caso, debido al nivel de organización y alcance de la presunta red criminal. Esto permitirá al Ministerio Público ampliar los plazos de investigación mientras se prepara para un juicio que promete ser un hito en la lucha contra la corrupción interna en las fuerzas del orden.

La operación Pandora saca a la luz la profunda vulnerabilidad de los sistemas de control en instituciones encargadas de la seguridad nacional, un caso que continuará en el centro del interés público.