Con una multitudinaria concentración este domingo, encabezada por el arzobispo de Santo Domingo, monseñor Francisco Osoria, cientos de católicos se unieron en un llamado a la acción para fortalecer los valores fundamentales de la familia y la vida en la sociedad. La actividad, organizada por la Arquidiócesis de Santo Domingo a través de la Vicaría Episcopal de Pastoral Familia y Vida, fue parte de la XIII edición de la caminata “Un paso por mi familia”, que se celebra anualmente en el Malecón de Santo Domingo.
Durante la marcha, los participantes ratificaron su compromiso con los valores cristianos que sostienen la estabilidad familiar, tales como el amor, la fe, el perdón, la misericordia y la paz. “Este año estamos resaltando el valor de la oración, el amor, la fe, el perdón, la misericordia y la paz, valores que son esenciales para la estabilidad familiar”, expresó monseñor Osoria. La multitud de feligreses, que marchó desde la esquina de la avenida George Washington con Máximo Gómez hasta el parque Eugenio María de Hostos, alzaron sus voces para pedir al Gobierno que se adopten medidas concretas que protejan el modelo tradicional de familia, basado en el matrimonio entre un hombre y una mujer.
Monseñor Osoria subrayó la importancia de “volver a la raíz” y “encontrarnos con Dios”, sugiriendo que la transformación de la sociedad comienza con un cambio en los corazones, siguiendo los principios establecidos por la palabra de Dios. En su mensaje, también instó a los presentes a fomentar en el seno familiar los valores que enseñan a vivir de acuerdo a las enseñanzas de Jesús.
Por su parte, los feligreses que participaron en la marcha valoraron la iniciativa de la Iglesia como un medio para fortalecer la fe y el compromiso con los valores familiares. “Lo que queremos es poner en alto el valor de la familia, el sentido del papá, la mamá y los hijos, y que en ese seno familiar se fomenten los valores que nos llevan a vivir según Jesús”, expresó uno de los participantes.
La actividad culminó con una homilía en la que se abogó no solo por la protección de la familia, sino también por políticas públicas que respeten y promuevan la vida humana en todas sus etapas. En este sentido, la Iglesia Católica hizo un llamado urgente a los legisladores para aprobar el nuevo Código Penal, un “Código sano que promueva y defienda la vida y la familia”, tal como se detalla en el manifiesto emitido durante la caminata.
Llamado a la aprobación del nuevo código penal
La Arquidiócesis de Santo Domingo también instó al Gobierno y a los legisladores a aprobar “urgentemente” un nuevo Código Penal que proteja la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural. “Da pena que por un grupito de personas con intereses particulares no se haya promulgado”, expresó el manifiesto de la Iglesia, refiriéndose a las demoras en la aprobación de la ley.
Además, los participantes en la marcha pidieron que se garantice el derecho al respeto y la protección de la vida, conforme a lo establecido en la Constitución Dominicana, específicamente en su artículo 37, que protege la vida desde la concepción, y en los principios de la Santa Sede y la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
La caminata y los mensajes que la acompañaron subrayan la posición firme de la Iglesia Católica en defensa de los valores tradicionales de la familia y la vida, instando a las autoridades a tomar medidas concretas para garantizar que estos principios sean protegidos y promovidos en el país.
