Una cadena de asesinatos tiene aterrados a conductores de autobuses en la ciudad colombiana de Barranquilla.
Al parecer, una banda de sicarios los extorsiona y los que no pagan se arriesgan a ser víctimas del crimen.
José Del Carmen Padilla se detuvo para recoger a un pasajero sin saber que era la parada de la muerte.
De dos disparos, su asesino le quitó la vida.
Por la crueldad de las imágenes, Primer Impacto se abstiene de mostrar el momento de la ejecución.
José deja una viuda y cuatro hijos a los que mantenía con lo poco que le daba su trabajo como conductor.
Sus compañeros reunieron dinero para sepultarlo y decidieron paralizar el transporte público.
En protesta porque tienen miedo que los sigan matando.
Y es que ya son 6 los muertos, las primeras investigaciones apuntan a una banda que le pide a los conductores parte de sus salarios.
Wellington Hernández hacía una ruta urbana y es otra de las víctimas.
Los asesinos le dispararon desde una moto a través de la ventana.
Herido trató de buscar ayuda.
La policía desplego un operativo por toda Barranquilla para acorralar a los asesinos que acabaron con la vida de los conductores.
Aseguran que están muy cerca de la banda de extorsiones y prometen que harán justicia.
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