María Lorena Argüello Salazar, semifinalista del certamen Miss Universo Ecuador 2024, falleció el domingo 1 de junio a los 28 años. La noticia fue confirmada por la organización del Concurso Nacional de Belleza (CNB) a través de sus redes sociales, expresando su profundo pesar y solidaridad con la familia de la joven. Hasta el momento, no se han revelado las causas de su deceso.

Representante del Distrito Metropolitano de Quito, Argüello se destacó en el certamen realizado el 8 de junio de 2024 en Machala, alcanzando un lugar en el Top 13. Además de su participación en el mundo de la belleza, María Lorena era médica cirujana, graduada en 2024 de la Universidad de Las Américas. Compaginó su carrera profesional con el modelaje y el voluntariado, colaborando activamente con la Fundación Reina de Quito en proyectos sociales destinados a apoyar a personas en situación de vulnerabilidad.

La noticia de su fallecimiento ha causado conmoción en la comunidad de los certámenes de belleza en Ecuador. Compañeras del concurso, como Nadia Mejía-Webb y Mara Topic, expresaron su tristeza y destacaron la bondad y compromiso social de Argüello. En redes sociales, numerosos seguidores han compartido mensajes de condolencia y homenaje, recordando su legado y el impacto positivo que dejó en su entorno.

María Lorena Argüello será recordada por su dedicación, carisma y vocación de servicio, cualidades que la convirtieron en un ejemplo tanto en el ámbito profesional como en el personal.

Durante su participación en Miss Universo Ecuador 2024, María Lorena se ganó el cariño del público por su autenticidad y compromiso con causas sociales, especialmente aquellas relacionadas con la salud mental y el empoderamiento femenino. En varias entrevistas, expresó su deseo de usar su plataforma como reina de belleza para inspirar a otras mujeres a perseguir sus sueños sin dejar de lado sus valores ni su preparación académica.

La organización del Miss Universo Ecuador anunció que rendirá un homenaje póstumo a Argüello durante la próxima edición del certamen, reconociendo su legado y aportes a la comunidad. También se evalúa la posibilidad de crear una beca o programa en su nombre para apoyar a jóvenes ecuatorianas en su formación profesional y participación en proyectos sociales, como una forma de honrar su memoria y mantener vivo su impacto.