El senador demócrata por Nueva Jersey, Cory Booker, calificó como un “abuso de poder” la actuación de las autoridades federales que retiraron por la fuerza al senador Alex Padilla durante una conferencia de prensa encabezada por la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, el pasado 12 de junio en Washington D.C. Booker denunció que este acto no es un hecho aislado, sino parte de un patrón preocupante de represión contra el disenso legítimo.

Padilla, senador por California, fue visiblemente afectado cuando intentó cuestionar públicamente a Noem sobre las recientes medidas migratorias del Departamento de Seguridad Nacional. El incidente, que ocurrió frente a la prensa, refleja la creciente tensión entre la administración republicana y senadores demócratas, mientras Booker advierte que la administración está usando la fuerza para silenciar voces críticas.

El senador Booker expresó que este tipo de acciones generan un ambiente de intimidación y socavan la democracia, al impedir que los funcionarios electos ejerzan su derecho a cuestionar y fiscalizar al gobierno. “No podemos permitir que se use la fuerza para callar a quienes representan a la gente y defienden sus derechos”, afirmó en su mensaje.

Por su parte, el senador Padilla emitió un comunicado señalando que su intención era legítima y necesaria para exigir transparencia sobre las políticas migratorias que afectan a miles de familias en el país. “Mi retiro forzoso es un síntoma del miedo que tienen a las preguntas difíciles”, dijo, comprometiéndose a seguir luchando por los derechos de los inmigrantes y la justicia social.

El Departamento de Seguridad Nacional aún no ha emitido una respuesta oficial sobre el incidente, pero la polémica ha aumentado el debate sobre el manejo de la libertad de expresión y la actuación de las fuerzas federales en eventos públicos de los inmigrantes, en medio de un clima político cada vez más polarizado en Washington.