Santo Domingo, RD – En los principales mercados populares del Gran Santo Domingo, como Los Mina y La Duarte, decenas de amas de casa alzan la voz ante la escalada de precios en productos básicos, denunciando que sus ingresos ya no cubren ni lo más elemental .
Erminia Basora, quien acude diariamente al mercado de Los Mina, confesó que ya “no basta con rascar para comer”, y que hasta el crédito se ha vuelto una necesidad para llevar alimentos a su mesa. Por su parte, Norma Batista comentó que, aunque su esposo gana apenas RD$5,000 al mes, deben estirarlos al máximo para un desayuno y almuerzo decente.
Los datos oficiales reflejan un panorama preocupante. El costo de la canasta familiar básica ronda los RD$46,700, mientras que el salario promedio apenas supera los RD$19,000, es decir, menos de la mitad de lo necesario para cubrir todo el mes .
Además, la Asociación de Comités de Amas de Casa del DN cuestiona las estimaciones oficiales del Banco Central y asegura que, tras sumar alimentos, servicios públicos y transporte, una familia de quintil bajo necesita alrededor de RD$23,200 solo para alimentación y gastos básicos.
Ante este panorama, muchas mujeres han tenido que modificar radicalmente sus hábitos de compra: sustituir proteínas como la carne por huevos o embutidos, reducir la cantidad de comidas al día, e incluso eliminar productos de higiene y limpieza del presupuesto. “Ya no se trata de ahorrar, es sobrevivir”, comentó una madre soltera en el mercado de Villa Consuelo.
Diversos economistas advierten que, sin una política pública clara de reajuste salarial y control inflacionario, la precariedad alimentaria seguirá creciendo en los sectores más vulnerables. Señalan que mientras no se combinen subsidios focalizados con estímulos al empleo formal, el ciclo de pobreza y hambre seguirá golpeando especialmente a las amas de casa, que cargan con el peso de la economía familiar sin apoyo suficiente.
