Santo Domingo. – El Colegio Médico Dominicano (CMD) anunció una gran marcha nacional para el próximo jueves 22 de mayo, como parte de su plan de lucha en reclamo de mejoras salariales para los médicos pensionados, la reposición del personal cancelado y mayores garantías de seguridad en los hospitales públicos del país.
La manifestación, que partirá a las 10:00 de la mañana desde el Hospital Salvador B. Gautier hasta el Ministerio de Salud Pública, busca presionar a las autoridades para que atiendan una serie de demandas que, según el gremio, han sido ignoradas por mucho tiempo. La decisión llega tras un paro de 48 horas que afectó gravemente los servicios médicos en todo el territorio nacional.
“Nos mantendremos firmes con nuestras demandas“, advirtió el presidente del CMD, Waldo Ariel Suero. “Primero, la reposición de todos los médicos cancelados. Segundo, una mejoría salarial para los médicos pensionados. Tercero, seguridad en los hospitales. Y cuarto, el cese inmediato de las cancelaciones injustificadas”, agregó.
Según el titular del gremio, la única vía para evitar que se profundice el conflicto es mediante un diálogo armonioso y efectivo. Sin embargo, hasta la fecha, no se ha formalizado una propuesta por parte del Ministerio de Salud Pública. Aunque el ministro Víctor Atala justificó las cancelaciones de unos 15 médicos por supuesto incumplimiento laboral, Suero denunció que no se respetó el debido proceso establecido por la Ley de Función Pública.
“Ellos estaban cumpliendo con su trabajo. Fueron cancelados sin amonestación previa ni notificación formal. Eso no es legal ni justo”, señaló Suero, asegurando que muchos de los afectados se enteraron de su destitución por sorpresa.
A pesar del conflicto, el CMD dejó abierta la posibilidad de un encuentro con las autoridades para la próxima semana. “Estamos dispuestos a dialogar, pero nuestras acciones continuarán si no hay una solución real. Esta lucha apenas comienza”, concluyó.
Diversos sectores sociales y organizaciones comunitarias han expresado su apoyo a la marcha, mientras miles de pacientes siguen a la expectativa, temiendo nuevas interrupciones en los servicios de salud si no se llega a un acuerdo pronto.



