Nueva York. El empresario Elon Musk anunció que a partir de mayo reducirá significativamente su implicación con el Departamento de Eficiencia Gubernamental Experimental (DOGE), asegurando que su trabajo en la iniciativa está “prácticamente terminado”. Musk hizo el anuncio durante una conferencia telefónica centrada en los resultados trimestrales de Tesla, en medio de un clima complicado para la empresa: sus ventas han disminuido y las acciones han caído más de un 50% desde su pico más reciente en diciembre.
El magnate indicó que planea reenfocar su tiempo y energía en sus empresas principales, como Tesla, SpaceX y X (antes Twitter), en un momento en el que se enfrenta a desafíos crecientes en el sector automotriz eléctrico y la competencia global.
El anuncio coincidió con una manifestación en una sala de exhibición de Tesla en Nueva York. Activistas climáticos del grupo Extinction Rebellion irrumpieron en el lugar y lo pintaron con aerosol, dejando mensajes ofensivos, algunos dirigidos a DOGE, y criticando lo que llamaron “un gobierno de caos y crueldad”.
Los manifestantes declararon que su acción buscaba “compensar el daño que se le está infligiendo al país” y alertar sobre la desconexión entre las políticas empresariales de Musk y la urgencia de la crisis climática. Dos personas fueron arrestadas tras el incidente.
