En una conversación exclusiva con Ranfi Trujillo, hijo del dictador Rafael Leónidas Trujillo, el tema de la fortuna del exlíder fue uno de los puntos clave que salió a relucir. Ranfi, quien se ha desmarcado de los actos de su padre y ha defendido su postura política, habló sobre la revelación de nuevos documentos de la CIA que han confirmado lo que su madre había dicho en su libro: gran parte de la fortuna de Trujillo fue destinada a una fundación que debía servir al pueblo dominicano.
Ranfi destacó la necesidad de esclarecer quién se quedó realmente con esa fortuna, ya que según los documentos desclasificados, el dinero y activos del dictador fueron destinados a un fondo de beneficio público. Sin embargo, advirtió que lo que falta por saber es qué ocurrió con esas riquezas y por qué no se han puesto a disposición de la población, tal como había sido estipulado.
Asimismo, abordó la figura de los conspiradores que llevaron a cabo el ajusticiamiento de Trujillo, sugiriendo que muchos de ellos actuaron por intereses personales y no por razones patrióticas. También se refirió al mito de que estos individuos fueron motivados por un deseo de derrocar la dictadura, argumentando que muchos de ellos eran parte del círculo cercano del régimen y sus acciones no fueron necesariamente impulsadas por ideales de libertad, sino por venganzas y ajustes de cuentas.
En el contexto de los archivos Trujillo, Ranfi señaló que mucho de este material fue desaparecido intencionalmente, probablemente por las familias que se beneficiaron de las fortunas acumuladas durante la dictadura, para ocultar la verdad y proteger sus intereses.
El tema de la desclasificación de documentos también estuvo en la mira, con Ranfi refiriéndose a la intervención estadounidense en la política dominicana de la época, indicando que la CIA jugó un papel activo en la caída de Trujillo, algo que los archivos revelan más claramente con el paso del tiempo.
En cuanto a la política dominicana actual, Ranfi hizo una reflexión sobre el futuro del país, destacando que el agotamiento de los partidos tradicionales abre un espacio para nuevas opciones políticas. Con su propio partido, Esperanza Democrática, Ranfi está buscando transformar la República Dominicana a través de propuestas como la descentralización del gobierno y el fortalecimiento de la agricultura, áreas que considera claves para el desarrollo nacional. Además, mencionó su apoyo a la seguridad nacional, insistiendo en que es necesario tomar decisiones firmes con respecto a la inmigración y la soberanía del país.
La conversación concluyó con un llamado a revisar la historia de la dictadura de Trujillo en su totalidad, sin prejuicios ni manipulaciones, para que las nuevas generaciones comprendan los matices y las complejidades de ese periodo, sin olvidar las grandes glorias del pueblo dominicano que se gestaron a pesar de las sombras de la tiranía.



