Estados Unidos expresó su preocupación por la creciente violencia y los arrestos masivos ocurridos en Turquía en los últimos días, como resultado de las protestas en las calles. Esta declaración fue realizada por el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, durante una entrevista con su homólogo turco, Hakan Fidan. En la conversación, Rubio manifestó su inquietud por los actos de represión y las manifestaciones que continúan sacudiendo el país.

El pronunciamiento fue difundido en un comunicado oficial después de la reunión entre ambos funcionarios. Las protestas en Turquía se desataron el pasado miércoles tras la detención del alcalde de Estambul, Ekrem İmamoğlu, principal rival electoral del presidente Recep Tayyip Erdoğan. Desde entonces, más de 100 personas han sido arrestadas y 1,418 acusadas de participar en concentraciones ilegales, según informaron las autoridades turcas. Este ha sido el movimiento de protesta más grande en el país desde 2013.

El ambiente de tensión en Turquía también ha afectado a la prensa, ya que un tribunal de Estambul ordenó la encarcelación provisional de siete periodistas turcos, acusados de involucrarse en manifestaciones prohibidas. Estos arrestos se suman a la creciente represión contra los medios de comunicación y la libertad de expresión en el país, que también se ha intensificado en las tres principales ciudades turcas, donde continúan las protestas.

Las autoridades estadounidenses han reiterado su preocupación por la situación en Turquía, subrayando la importancia de respetar los derechos humanos y las libertades fundamentales, especialmente en el contexto de las recientes manifestaciones políticas.