Donald Trump ordenó al Departamento del Tesoro suspender la acuñación de las monedas de un centavo, conocidas como “pennies”, debido a su elevado costo de producción. Según el mandatario, este cambio busca reducir los gastos de la administración, ya que el costo de fabricar cada moneda supera su valor nominal.

La producción de un solo centavo cuesta cerca de cuatro veces su valor, debido al incremento en los precios de los metales utilizados en su fabricación, como el cobre y el zinc. Esta situación ha sido vista como un gasto innecesario para el país. De acuerdo con la Casa de la Moneda de Estados Unidos, en el año fiscal 2024, la creación de estas monedas generó una pérdida de 85.3 millones de dólares al gobierno.

La medida, que fue anunciada el lunes, ha generado debate entre los ciudadanos y economistas. Algunos argumentan que eliminar el centavo podría simplificar las transacciones y reducir costos, mientras que otros temen que afecte la economía de manera negativa, especialmente a las personas que dependen de estas monedas para pequeñas compras.

El gobierno de Estados Unidos espera que, al eliminar la acuñación de los centavos, se logre un ahorro significativo, estimado en unos 85 millones de dólares anuales. Esta medida es parte de un esfuerzo más amplio para optimizar los recursos y reducir el gasto público en un contexto económico desafiante.