Francisco Tavárez destacó la importancia de preservar la integridad del periodismo en un ecosistema digital que ha cambiado radicalmente las reglas del juego. Señaló que, en un entorno donde la extorsión mediática ha sido una práctica común, figuras como Huchi Lora, Marino Zapete y Juan Bolívar Díaz han sido excepciones que han mantenido su credibilidad y compromiso con la verdad.
El comunicador advirtió sobre las consecuencias de atacar injustamente a estos profesionales, afirmando que “si destruimos su reputación, nos quedamos sin referentes”. Subrayó que el periodismo necesita voces confiables y que, en lugar de difamar sin fundamento, quienes hagan acusaciones deben presentar pruebas.
Finalmente, Tavárez enfatizó que la honra y el legado de estos periodistas deben ser protegidos, ya que representan un baluarte de la información veraz y el ejercicio ético de la profesión. Defendió la necesidad de un periodismo responsable que no se preste a intereses oscuros y que siga siendo una fuente confiable para la sociedad.
