El exsenador demócrata por Nueva Jersey, Bob Menéndez, uno de los políticos hispanos que gozó de más poder en Washington D.C., fue condenado este miércoles a 11 años de cárcel por cargos relacionados con sobornos, corrupción y por servir como agente para el gobierno de Egipto.
La fiscalía había solicitado una pena de 15 años de prisión para Menéndez, quien durante años fue una figura clave en el Senado de los Estados Unidos. Su defensa, en cambio, argumentó que su trayectoria de servicio público ameritaba una condena menor, de menos de dos años, pero el juez federal de distrito, Sydney Stein, desestimó la solicitud y dictó la sentencia definitiva.
Luego de un juicio que se extendió por dos meses, un jurado declaró culpable al exsenador el pasado 16 de julio de 16 cargos, entre ellos soborno, fraude, extorsión, obstrucción a la justicia y por recibir pagos para actuar como agente de gobiernos extranjeros, incluyendo Egipto y un fondo de Catar.
Menéndez, de 71 años, había solicitado clemencia antes de conocer la decisión final. En agosto, tras ser hallado culpable, renunció a su cargo en el Senado y dimitió como presidente del Comité de Relaciones Exteriores, lo que marcó su caída de la cúpula del poder a la condición de criminal convicto.
El exsenador había ocupado su escaño en el Senado desde 2006 y, tras su condena en 2024, intentó apelar el fallo. “Nunca he violado mi juramento público. Nunca he sido otra cosa que un patriota de mi país y para mi país”, declaró entonces. Sin embargo, la justicia no dio lugar a su defensa y el proceso culminó con su sentencia definitiva.



