En un emotivo discurso enmarcado en las festividades navideñas, el presidente Luis Abinader delineó una ambiciosa visión para la República Dominicana de cara al año 2028. Hablando como “un padre de familia, esposo y ciudadano comprometido”, el mandatario destacó los logros alcanzados durante su gestión y presentó objetivos claves para el futuro, entre los que se encuentran la erradicación del hambre y la reducción de la pobreza general al 15%, así como de la pobreza extrema a menos del 1%.

Metas claves y estrategias

El presidente Abinader enfatizó que estos objetivos no son sueños lejanos, sino metas tangibles que ya se están construyendo mediante programas como “Supérate”, la ampliación del INFOTEP y el ITLA, y las estrategias para transformar a las micro, pequeñas y medianas empresas en formales. Además, resaltó el compromiso del gobierno con garantizar el acceso universal a agua potable, aumentar la empleabilidad de jóvenes universitarios y proporcionar viviendas dignas a las familias dominicanas.

Educación y crecimiento económico

Abinader destacó el papel transformador de las escuelas, que definió como “el corazón del futuro”, señalando que su gobierno ha implementado programas enfocados en educación ambiental, salud escolar y seguridad vial. Asimismo, delineó una estrategia económica que incluye la expansión de zonas francas, el crecimiento del turismo, el nearshoring y la atracción de inversiones extranjeras para lograr una renta per cápita de $15,000 y expandir la clase media al 50% de la población.

Infraestructura y movilidad

Otro aspecto central del discurso fue la mejora en la infraestructura de transporte. Anunció que el sistema integrado de transporte de Santo Domingo, junto con el monorriel de Santiago, estarán completados para 2026, posicionando a estas ciudades entre las mejor comunicadas de América Latina. Estos proyectos buscan no solo mejorar la movilidad, sino también simbolizar el potencial del país cuando trabaja unido.

El presidente reafirmó su compromiso con la erradicación del hambre, calificándola como una prioridad absoluta de su gestión. “Declarar a República Dominicana libre de hambre para el 2028 no es solo un objetivo, es una promesa que este gobierno asume con toda la fuerza y el compromiso que merece”, expresó.

En un tono esperanzador, Abinader llamó a los dominicanos a soñar y a construir juntos un país donde el progreso sea un derecho y no un privilegio. “Este país es más fuerte de lo que a veces pensamos”, aseguró, recordando los logros históricos de la nación y la resiliencia de su gente.

El presidente cerró su intervención deseando a los dominicanos una Navidad llena de amor, paz y unión, y alentándolos a continuar trabajando juntos para construir una República Dominicana más próspera e inclusiva. “Que el verdadero regalo sea la esperanza en el país que queremos”, concluyó.