En medio de la crisis que atraviesa el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), el comunicador Manuel Conde ha manifestado en su reciente análisis que muchos de los que se quejan dentro del partido son, en realidad, “caballos de Troya” de Leonel Fernández, expresidente y fundador de la Fuerza del Pueblo.
Durante su intervención, Conde destacó que la situación actual del PLD es alarmante, pues ha visto una reducción drástica en su base de apoyo y una pérdida de relevancia política que lo ha dejado en un tercer lugar en las recientes elecciones. Según su argumento, las lesiones internas y la falta de autocrítica han contribuido a esta caída. “Muchos alegan que esta crisis se debe a traiciones internas, y yo creo que hay mucho de cierto en eso. Ahora se convoca un proceso de reforma, pero ¿qué tan genuino es este llamado a la renovación?”, cuestionó.
El comunicador señaló que, a pesar de los esfuerzos de la alta dirección del partido por apuntalar una renovación, la estructura aún está dominada por aquellos que han estado en el poder durante años, lo cual no respalda un cambio verdadero. “Danilo Medina y Charles Mariotti han manifestado su intención de no continuar al frente del PLD, pero esto tiene que ir acompañado de un cambio real, no de una simple reestructuración que permita a las viejas prácticas mantenerse”, agregó Conde.
En una perspectiva crítica, Conde subrayó cómo algunos líderes actuales del partido, que han expresado sus aspiraciones políticas, podrían estar trabajando en interés de facilitar el regreso de Fernández. “La ‘renovación’ que proponen algunos parece más un intento de entregar el partido de nuevo a Leonel Fernández en 2028 que un verdadero interés por revitalizar el PLD”, aseguró.
El comunicador también destacó el papel de la corrupción en la percepción pública del partido, reiterando que el legado de sus líderes ha sido manchado por escándalos y malas prácticas. “Lamentablemente, el único que parece tener la capacidad de contrarrestar esta ola y mantener el control es Danilo Medina, lo cual es preocupante para muchos que anhelan un cambio real”, concluyó Conde.



