Mantener sus puertas abiertas no ha sido una tarea fácil para las compraventas de Herrera. Luego de años de ser el centro de la actividad económica en algunos barrios, ahora estas tiendas luchan por mantenerse a flote.

Julio Hernández, dueño de una compraventa en Herrera durante las últimas dos décadas, ha visto cómo ha disminuido su clientela. Para adaptarse, ha reducido los intereses de los empeños a hasta un 2% mensual e incursionado en otros servicios para evitar cerrar, como han tenido que hacer algunos de sus vecinos. “Es que ya casi no se empeña nada, hay que hacer rejuego con los colchones, con las licuadoras, y aparecen dos o tres cadenitas de oro para uno poder mantenerse”, comentó Hernández.

A diferencia de las instituciones de crédito, las compraventas no tienen restricciones estrictas. Sus clientes pueden empeñar desde tenis, botas, herramientas, electrodomésticos y hasta prendas de oro por un plazo de hasta cuatro meses. “Nosotros empeñamos de todo aquí: bocinas, radios, taladros y cosas así”, explicó Hernández.

Sin embargo, durante años, las compraventas eran la salida más rápida para quienes necesitaban dinero en una emergencia. Ahora, muchos de sus clientes tradicionales han migrado hacia la banca formal y las financieras. “Cualquier taladro cuesta 2,100 pesos, entonces una compraventa te ofrece 500 pesos y no vale la pena”, mencionó un comerciante.

Para permanecer abiertas, muchas compraventas han tenido que transformarse en pequeñas tiendas de electrodomésticos. “Cada vez que tengo un poquito de dinero y no tengo efectivo, vengo a buscarlo aquí. No todo el tiempo tengo efectivo, pero cuando se me acaba, vengo aquí a buscar para seguir negociando”, explicó un cliente habitual.

Delio Acosta, cliente desde hace más de 20 años, asegura que las compraventas aún representan una opción de dinero en efectivo rápido. “A pesar de las dificultades, las compraventas siguen siendo una solución para muchos de nosotros”, comentó Acosta.

Las compraventas en Herrera siguen adaptándose a los cambios económicos y sociales, luchando por seguir siendo una fuente de apoyo financiero para su comunidad.