La periodista Altagracia Salazar, abordó el tema, de la conferencia de la procuradora general de la República, Miriam Germán, quien utilizó una metáfora gráfica para ilustrar los acuerdos negociados por el Ministerio Público en casos de corrupción. “Si vas detrás de un tiburón, no puedes detenerte en una ballenita”, fue la expresión empleada por Germán para simplificar la complejidad de estos acuerdos.
La procuradora destacó que esta frase no solo clarifica los acuerdos judiciales, sino que también desenmascara la campaña de desprestigio dirigida particularmente contra el Ministerio Público desde la revelación del caso Calamar. En la misma línea, la fiscal litigante Mirna Ortiz enfatizó que no hubo reacciones públicas similares a los acuerdos alcanzados en casos anteriores como el caso Pulpo y el caso Coral, donde se hicieron pactos similares sin generar tanta controversia.
Ortiz explicó que la gestión mediática en el caso Calamar, orientada a revertir la aceptación previa de estos acuerdos, no surge de manera espontánea, sino que responde a iniciativas bien financiadas, como reveló un informe de Diario Libre sobre una campaña de lobby en Washington con recursos significativos.
Durante el evento, se discutió cómo funcionan los acuerdos judiciales bajo el modelo norteamericano, donde no solo se excluyen a los delatores de los expedientes, sino que se ofrece protección integral a los testigos, incluyendo cambio de identidad, seguridad para la familia y apoyo económico según sea necesario.
El encuentro, descrito como una “escuelita”, sirvió para educar sobre las leyes y para confrontar críticas infundadas que intentan desacreditar los procesos judiciales vigentes.



