SANTO DOMINGO.- La Procuraduría Fiscal de Santo Domingo Este y Norte logra una condena de 20 años de prisión para un hombre que abusó sexualmente de una niña de 10 años en Santo Domingo Este.
En una decisión decisiva, el Primer Tribunal Colegiado, compuesto por los jueces Elizabeth Esperanza Rodríguez Espinal, Flor E. Batista Polo y José Leonel Asencio Quezada, impuso la sentencia contra Willi Dipitón Martínez, de 34 años de edad. Este individuo fue hallado culpable de cometer este horrendo crimen en el año 2022.
La fiscal litigante Ivette Mateo presentó pruebas contundentes ante el tribunal, respaldando la acusación del Ministerio Público. La investigación, liderada por la fiscal Mariana Álvarez, demostró la responsabilidad penal del acusado, violando múltiples disposiciones del Código Penal Dominicano y la Ley de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes.
El proceso judicial, que inició tras la denuncia formal marcada con el No. 12252, culminó con la imposición de una sentencia ejemplar. Los jueces ordenaron que Willi Dipitón Martínez cumpla su condena en la Penitenciaría Nacional de La Victoria, marcando un precedente en la lucha contra los abusadores.
Abuso sexual infantil
El abuso infantil en la República Dominicana, como en otros lugares del mundo, se refiere a cualquier acción o falta de acción que cause daño físico, emocional o sexual a un niño o niña. Este fenómeno puede manifestarse de diversas formas, y es una grave violación de los derechos de los menores.
Las formas de abuso infantil incluyen:
-Abuso Físico: Implica causar daño físico deliberado a un niño, ya sea mediante golpes, sacudidas, quemaduras u otras formas de agresión física.
-Abuso Emocional: Se refiere a comportamientos que afectan negativamente el bienestar emocional del niño, como el rechazo constante, la humillación, el aislamiento o la intimidación.
-Abuso Sexual: Incluye cualquier actividad sexual no consensuada con un niño. Esto puede involucrar tocamientos inapropiados, exposición a material sexual, explotación sexual o violación.
Existen leyes y políticas que buscan proteger a los menores y castigar a quienes perpetran estos actos.
Es fundamental que la sociedad fomente un entorno seguro para los niños, brinde apoyo a las víctimas y promueva la denuncia de cualquier forma de abuso. La colaboración entre las autoridades, organizaciones civiles y la comunidad en general es esencial para erradicar este problema y proteger el bienestar de los niños en la República Dominicana y en todo el mundo.
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