En un caso que ha conmocionado a toda la comunidad del barrio Birán en la provincia Barahona, una madre está exigiendo justicia después de la presunta violación y fallecimiento de su hija de dos años.

Según las informaciones, el principal sospechoso es Dorkie Antonio Mesa Matos, conocido como Trujillo, pareja de la madre de la pequeña.

La señora, visiblemente afectada por el dolor y la indignación, expresó: “Como madre, nadie desea que le hagan daño a su hija; la gente solo ve la parte negativa de mi vida”. Sus palabras reflejan el profundo sufrimiento que atraviesa ante esta terrible tragedia.

Por otro lado, el padre de la menor ha instado a las autoridades a que también se procese a la madre en el caso. Se recuerda que la pequeña había sido trasladada este lunes, al Hospital Regional Docente Universitario Jaime Mota, donde los médicos habían identificado a la pequeña, con signos de violación, tras evidencias de hematomas en el tórax, así como en las regiones genitales y en el ano.

Sin embargo, la pequeña no resistió, y lamentablemente falleció durante la asistencia medica.

 

Abuso sexual infantil

El abuso infantil en la República Dominicana, como en otros lugares del mundo, se refiere a cualquier acción o falta de acción que cause daño físico, emocional o sexual a un niño o niña. Este fenómeno puede manifestarse de diversas formas, y es una grave violación de los derechos de los menores.

Las formas de abuso infantil incluyen:

-Abuso Físico: Implica causar daño físico deliberado a un niño, ya sea mediante golpes, sacudidas, quemaduras u otras formas de agresión física.

-Abuso Emocional: Se refiere a comportamientos que afectan negativamente el bienestar emocional del niño, como el rechazo constante, la humillación, el aislamiento o la intimidación.

-Abuso Sexual: Incluye cualquier actividad sexual no consensuada con un niño. Esto puede involucrar tocamientos inapropiados, exposición a material sexual, explotación sexual o violación.

Existen leyes y políticas que buscan proteger a los menores y castigar a quienes perpetran estos actos.

Es fundamental que la sociedad fomente un entorno seguro para los niños, brinde apoyo a las víctimas y promueva la denuncia de cualquier forma de abuso. La colaboración entre las autoridades, organizaciones civiles y la comunidad en general es esencial para erradicar este problema y proteger el bienestar de los niños en la República Dominicana y en todo el mundo.

 

 

 

 

 

 

 

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