El Congreso chileno aprobó un nuevo proyecto que busca omitir la palabra «mujer» y reemplazarla por el término «persona menstruante», con dicha aprobación la iniciativa ahora pasa al Senado.

Con la idea legislativa se quiere imponer en el parlamento la «neolengua progre», gracias a la coalición del presidente Boric.

De acuerdo a la diputada Emilia Schneider, el término de «mujer» sería manipulado en favor de hombres trans, personas no binarias, queer, u otras variantes de género, quienes biológicamente han nacido con sexo femenino, pero no se identifican con él.