Los movimientos del presidente de Rusia, Vladimir Putin, en las próximas horas decidirán la gravedad de la crisis para Ucrania, pero también determinarán un impacto potencialmente enorme para los estadounidenses y en un mundo ya profundamente inestable.

Si Putin lanza una invasión a gran escala en toda Ucrania o si decide limitar su incursión al envío de tropas a las dos regiones prorrusas en el este que reconoció como independientes, eso dictará la severidad de las sanciones que Estados Unidos y sus aliados impongan. Las cuales, dicen, serán las más duras que jamás se hayan impuesto a Moscú.