El presidente dominicano, Luis Abinader, afirmó este lunes que su país “no puede” atender los servicios de salud de “dos países” y que su Gobierno continuará dando cumplimiento a la ley de migración que permite la deportación de ciudadanos extranjeros indocumentados.

“Nosotros sencillamente estamos cumpliendo con la ley de migración y lo estamos haciendo con el debido respeto a los derechos humanos, en caso de algún exceso lo corregimos, pero el sistema de salud no puede atender a dos países”, afirmó el gobernante al responder a periodistas sobre el proceso de deportación de haitianas embarazadas.

Abinader aseguró que se están dando atenciones de urgencia en los hospitales dominicanos a ciudadanos indocumentados, pero que el sistema de salud del país solo puede garantizar los servicios a quienes “pagan impuestos, a los dominicanos y a las dominicanas”.