En el programa #TuMañanabyCachicha, los comunicadores reflexionaron sobre la importancia de promover los valores y las buenas costumbres, destacando el papel crucial que tienen tanto el Gobierno como los medios de comunicación en la formación de niños y jóvenes.
El debate surgió al analizar cómo factores externos, como la televisión y otros medios masivos, impactan el comportamiento de las nuevas generaciones. Aunque la televisión sigue siendo uno de los medios más comunes y accesibles en todos los niveles socioeconómicos, su programación a menudo incluye contenidos que podrían influir negativamente en los espectadores más jóvenes.
“Hay un sinnúmero de películas violentas, de terror, y con escenas explícitas que simulan actos sexuales, que no cuentan con restricciones adecuadas”, señalaron los comunicadores, advirtiendo que muchas de estas producciones se transmiten en horarios tempranos, cuando niños y adolescentes tienen mayor acceso a ellas. A pesar de que algunas emisiones se programan en horario nocturno, los bloques de contenido especial incluyen una variedad de situaciones inapropiadas que no consideran el impacto en la audiencia infantil.
El panel hizo un llamado a las autoridades para que implementen regulaciones más estrictas en la programación televisiva y trabajen junto a los medios de comunicación en la promoción de valores positivos. Asimismo, destacaron la necesidad de una mayor supervisión del contenido que consumen los jóvenes, fomentando una programación que inspire y eduque en lugar de exponer a los espectadores a contenidos potencialmente perjudiciales.
“Los medios de comunicación tienen una responsabilidad social y un rol fundamental en la construcción de una sociedad más sana y consciente”, concluyeron, instando a los actores involucrados a trabajar en conjunto para proteger a las nuevas generaciones y promover valores esenciales para su desarrollo.



