La incomparecencia de varios ejecutivos para testificar en el juicio por los sobornos de los US$92 millones que pagó Odebrecht a cambio de obras de infraestructura, se ha convertido en un obstáculo para el avance del proceso judicial en el país y ha motivado la posibilidad de que las autoridades de la Procuraduría General de la República (PGR) contemplen finiquitar el acuerdo suscrito con la constructora brasileña.
Ayer las juezas del Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional se vieron en la necesidad de suspender el juicio debido a la incomparecencia de los testigos que están en Brasil. Ordenaron la conducencia de Mauricio Dantas Bezerra y de Rodrigo Maluf Cardoso y fijaron para el 8 de enero del 2021 la continuación del proceso. Esto a fin de que el Ministerio Público ejecute la conducencia de esos ejecutivos de Odebrecht que figuran como los primeros en la lista de testigos de la Procuraduría.