En la zona de la Parada 7, cerca del Ingenio y la Autopista, en Navarrete, Santiago, se reportó otro atraco a una banca, sumando un caso más a la larga lista de delitos que azotan la región. La frecuencia de estos hechos ha llevado a comunicadores locales al borde del hartazgo. “Esto a los días 30, 20, 25, 27… el día que menos se producen son 23”, reclamó al aire un locutor, visiblemente exasperado.

A la par de los atracos, se suman otros episodios que ponen en evidencia el caos: una trifulca entre tres policías y un ciudadano con problemas mentales que encendió fuego a una basura dejó claro que las autoridades no manejan las crisis con criterio. “La policía dominicana no sabe cuándo hay crisis”, denunció el comunicador, resaltando la falta de preparación y sensibilidad.

“Uno tiene que reír para no llorar”, sentenció, al reflejar el sentimiento colectivo de impotencia ante una inseguridad que se normaliza mientras los días del calendario se vuelven sinónimo de peligro.