La menstruación representa una barrera significativa para el desarrollo de mujeres y niñas en República Dominicana. Así lo reveló el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), al señalar que un 20 % de ellas no puede asistir a clases o al trabajo durante su periodo menstrual, debido a la falta de acceso a productos higiénicos, servicios adecuados y a un entorno comprensivo.

La organización internacional hizo un llamado al Estado dominicano para implementar políticas públicas que garanticen el acceso universal a productos de higiene menstrual y condiciones dignas, especialmente en las escuelas. Esto incluye la provisión de kits menstruales, uniformes escolares apropiados y educación menstrual integral. UNICEF también resaltó la necesidad de involucrar a toda la sociedad, incluyendo a los hombres, en la eliminación de los estigmas y prejuicios que perpetúan la desigualdad de género.

Además del impacto físico, UNICEF advirtió que la menstruación en contextos de pobreza y desinformación puede generar vergüenza, ansiedad y discriminación, afectando gravemente la autoestima y el bienestar emocional de niñas y adolescentes. La falta de privacidad y condiciones higiénicas adecuadas en muchas escuelas del país obliga a muchas estudiantes a quedarse en casa durante varios días cada mes, interrumpiendo su aprendizaje y aumentando el riesgo de abandono escolar.

Expertos en educación y salud sexual destacaron que el tema sigue siendo un tabú en muchas comunidades, lo que impide que se aborde abiertamente en los hogares y en los centros educativos. Esta falta de diálogo, aseguran, perpetúa mitos y estigmas que solo profundizan las brechas de género desde la infancia. UNICEF planteó que la menstruación debe ser tratada como un asunto de derechos humanos y no como una problemática privada.

Finalmente, el organismo internacional insistió en que garantizar una gestión menstrual digna no solo es una cuestión de salud, sino una inversión en el desarrollo social y económico del país. “Invertir en acceso a productos menstruales, infraestructura adecuada y educación es apostar por un futuro más equitativo para las niñas dominicanas”, afirmó la entidad. UNICEF se comprometió a seguir trabajando con instituciones públicas y organizaciones locales para impulsar una estrategia nacional que asegure justicia menstrual para todas.