Santo Domingo. — El gobierno de Israel ordenó el cierre temporal de su embajada en Santo Domingo y suspendió todos los servicios consulares tras los recientes ataques aéreos lanzados por Israel contra instalaciones militares y nucleares en Irán, en medio de una creciente escalada regional.
Según el Ministerio de Exteriores israelí, las embajadas en todo el mundo, incluida la de República Dominicana, han sido clausuradas por “razones de seguridad ante la anticipación de posibles represalias” provenientes de Teherán.
En su lugar, los ciudadanos israelíes residentes en el país caribeño han sido instados a mantenerse en contacto con la Cancillería israelí, comunicar su ubicación y abstenerse de exhibir símbolos nacionales en lugares públicos.
Las reacciones en los medios y entre gobiernos internacionales han sido inmediatas. Estados Unidos ha negado participación en los ataques, definiéndolos como acciones unilaterales de Israel. Al mismo tiempo, países de Europa —como Alemania y Suecia— han reforzado la seguridad en sitios comunitarios judíos como medida preventiva.
La suspensión de actividades consulares impacta principalmente a quienes requerían servicios como solicitud de visas o apoyo legal. Las autoridades israelíes indicaron que no hay una fecha establecida para reanudar operaciones y que la reapertura dependerá de la evaluación de riesgos en curso. Mientras tanto, la comunidad israelí en República Dominicana es aconsejada a evitar actos públicos y a mantenerse atenta a directrices de seguridad.
Contexto del conflicto
La operación militar israelí, conocida como “León Creciente”, implicó un ataque coordinado con más de 200 aviones de combate sobre más de 100 objetivos en Irán, entre ellos instalaciones nucleares en Teherán, Natanz y Khondab. En la ofensiva fueron eliminados varios altos mandos iraníes, incluidos el jefe de la Guardia Revolucionaria, Hossein Salami, elevando la tensión a niveles sin precedentes.
Irán respondió lanzando más de cien drones en represalia, aunque la mayoría fueron interceptados por Israel. Esta escalada llevó a Israel a suspender sus misiones diplomáticas globales por temor a posibles atentados o acciones encubiertas en respuesta a sus ataques.
