Ciudad de México. – La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, alzó la voz este fin de semana para exigir respeto a los derechos de los migrantes mexicanos en Estados Unidos, tras las recientes redadas llevadas a cabo en Los Ángeles, California. En un evento en Puebla, Sheinbaum rechazó abiertamente la política migratoria impulsada por el expresidente Donald Trump y confirmó la detención de al menos 38 ciudadanos mexicanos durante los operativos.

“Los Ángeles no sería lo que es sin los mexicanos”, afirmó la mandataria, al tiempo que hizo un llamado a las autoridades estadounidenses a cesar el uso de la fuerza contra migrantes. “No es con redadas ni con violencia como se va a atender el fenómeno migratorio”, subrayó, mientras su gobierno activaba protocolos de protección para los connacionales detenidos.

La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) emitió un comunicado oficial expresando la “profunda preocupación” del gobierno mexicano por la situación y exhortó a EE.UU. a garantizar el respeto al debido proceso, la dignidad humana y los derechos fundamentales de los migrantes. “No somos animales”, sentenció un diputado federal migrante desde Los Ángeles, al denunciar el trato excesivo y violento durante las detenciones.

El temor y la incertidumbre se han extendido a los campamentos migrantes del lado mexicano de la frontera. Naomi, una madre con hija pequeña, expresó su angustia: “Yo tengo hija y me da miedo. Puede que me vayan a agarrar”. Luis, un colombiano en la capital mexicana, confesó que los videos de las redadas lo han hecho desistir del sueño americano: “Más ganas de volverse uno para el país de uno”.

El gobierno mexicano insistió en que continuará defendiendo a sus ciudadanos y abogando por un enfoque más humano ante la migración. Mientras tanto, la tensión sigue creciendo entre los migrantes que viven con el temor constante de ser capturados y deportados.