Una niña de apenas 11 años se ha convertido en heroína en un pequeño pueblo de China, luego de salvar a su hermanita menor de ser atropellada por un taxi eléctrico que irrumpió violentamente en su vivienda. El impactante momento fue captado por una cámara de seguridad, cuyas imágenes se han viralizado en redes sociales por la valentía y rapidez con la que la menor actuó.
En el video se observa cómo el taxi eléctrico, conducido por un hombre, acelera de forma repentina y atraviesa la entrada del hogar, dirigiéndose directamente hacia la niña más pequeña. Fue entonces cuando su hermana mayor reaccionó instintivamente y logró apartarla segundos antes de que el automóvil la aplastara contra la pared.
El conductor, quien confundió el acelerador con el freno del taxi eléctrico, expresó su pesar por el accidente y se comprometió a pagar los daños causados a la vivienda. Afortunadamente, no se reportaron heridos graves.
Los accidentes como el ocurrido en China, donde un vehículo perdió el control y casi atropella a una niña, ponen de relieve la importancia de implementar medidas de seguridad tanto en los hogares como en la vía pública. Es fundamental que las familias mantengan una supervisión constante sobre los menores, sobre todo en zonas cercanas a entradas o áreas de tránsito. Colocar barreras físicas, evitar que los niños jueguen cerca de puertas abiertas a la calle y educarlos desde temprana edad sobre cómo actuar en situaciones de peligro puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
Por otro lado, los conductores, especialmente aquellos de edad avanzada, deben extremar la precaución, realizar chequeos médicos periódicos y asegurarse de que sus vehículos estén en óptimas condiciones. Conducir en zonas residenciales requiere atención total, velocidad reducida y respeto por la seguridad de los peatones. Este tipo de incidentes nos recuerda la responsabilidad compartida que tenemos como sociedad para prevenir tragedias y proteger a los más vulnerables.



