Santo Domingo. – En una estremecedora denuncia pública, una madre dominicana reveló que vive atemorizada por sus propios hijos, a quienes acusó de intentar abusar sexualmente de ella y de amenazarla con quemarla viva dentro de su hogar.

Con lágrimas en los ojos y visiblemente aterrada, la mujer relató que ha sufrido 22 años de violencia, amenazas y abusos por parte de sus descendientes. “Tengo 22 años en lo mismo. Ellos me agarraron, me bajaron la falda y me dijeron: ‘venga doña, para metérselo’”, expresó entre sollozos, en una escena que ha conmocionado a quienes escucharon su testimonio.

Según explicó, sus hijos son consumidores de drogas y se tornan extremadamente violentos cuando están bajo los efectos de estas sustancias. “No me importa lo que hagan con ellos, pero no los dejen salir, porque mi vida corre peligro”, imploró la madre, quien asegura haber tenido que huir de su propia vivienda para preservar su vida.

La mujer teme que en cualquier momento sus hijos cumplan con su amenaza de prenderle fuego mientras duerme. “Yo no quiero morir quemada por mis propios hijos”, advirtió.

El caso, que revela una dolorosa y extrema tragedia familiar, ha encendido las alarmas sobre la necesidad urgente de atención psicológica, intervención social y acción legal ante situaciones de violencia intrafamiliar que, muchas veces, se mantienen en silencio por miedo, vergüenza o falta de apoyo institucional.

Hasta el momento, no se han ofrecido detalles sobre acciones policiales en torno al caso, pero la denuncia ha generado indignación en redes sociales y llamados a las autoridades para actuar con rapidez.

La madre aseguró que en múltiples ocasiones ha acudido a las autoridades, pero no ha recibido la protección necesaria. “He ido a la fiscalía, he puesto querellas, pero ellos salen y vuelven peor. Ya no tengo fuerzas”, lamentó. Su testimonio pone en evidencia las fallas del sistema de justicia y la escasa respuesta institucional ante casos de violencia extrema dentro del núcleo familiar.

Organizaciones de derechos humanos y protección a la mujer han exigido una intervención urgente en este caso, calificándolo como una muestra brutal del abandono estatal. “No se trata solo de un caso de violencia, es una emergencia que requiere atención psicológica, protección inmediata y castigo ejemplar para los responsables”, expresó una vocera del Centro de Atención a Víctimas de Violencia Intrafamiliar.