Colapsa techo de construcción de una obra en construcción en Santiago.

Un desplome parcial en el techo de una edificación ubicada en el sector La Gallera de Santiago generó alarma entre los residentes de la zona la tarde de este viernes, aunque, afortunadamente, no se reportaron personas lesionadas.

El incidente ocurrió pasadas las 12 del mediodía, en una obra que, según confirmaron las autoridades, se encontraba detenida oficialmente. No obstante, testigos indicaron que en el lugar se encontraban obreros de nacionalidad haitiana realizando trabajos no autorizados, lo que pudo haber provocado la caída de parte de la estructura.

“Nos comunicamos de inmediato con el viceministro del Ministerio de Vivienda, quien nos confirmó que esta obra estaba paralizada. Sin embargo, parece que los trabajadores comenzaron a despegar la madera del encofrado, y esto provocó el colapso parcial del techo”, explicó una fuente cercana al hecho.

Vecinos del entorno expresaron gran preocupación, indicando que esta no es la primera vez que parte de la edificación cede. “Ya se han desplomado secciones en dos ocasiones anteriores. Hoy, los escombros volaron hasta los patios y casas cercanas. Aquí viven niños, familias enteras. Si alguien hubiese estado cerca, pudo haber muerto”, denunció un residente.

Los comunitarios también señalaron fallas estructurales visibles en la construcción, como columnas torcidas, varillas inadecuadas y techos cuarteados, lo que a su juicio representa un peligro latente para toda la zona. Además, denunciaron que la obra lleva cerca de cuatro años en ejecución, siendo detenida en varias ocasiones sin una solución definitiva.

Tras el colapso, las autoridades indicaron que investigarán las causas del accidente y tomarán medidas contra quienes hayan retomado los trabajos sin autorización.

El colapso de techos en edificaciones es un riesgo grave que suele estar asociado a fallas estructurales, uso inadecuado de materiales, sobrecarga o trabajos mal ejecutados, como ocurrió recientemente en el sector La Gallera de Santiago. Este tipo de incidentes puede evitarse si las construcciones siguen los estándares establecidos por el Código de Edificaciones y son supervisadas por profesionales certificados. La falta de seguimiento, el uso de materiales de baja calidad y la reanudación no autorizada de obras detenidas son factores que incrementan el peligro.

Para prevenir desplomes, es fundamental que tanto constructores como autoridades aseguren inspecciones periódicas, utilicen varillas y cementos adecuados y respeten los tiempos de fraguado. También se debe evitar que personal no calificado manipule estructuras en desarrollo. Las comunidades deben mantenerse alerta ante señales de grietas, columnas torcidas o techos agrietados, y reportar a las autoridades cualquier irregularidad. La prevención, acompañada de una vigilancia efectiva, puede salvar vidas.