Bauta Rojas afirmó esta mañana que la economía dominicana atraviesa una recesión real para la mayoría de los ciudadanos, con una caída evidente en el poder adquisitivo, el consumo popular y la circulación de dinero en los sectores productivos y comerciales del país.
Aseguró que “la gente está comiendo una vez al día” y que incluso colmaderos identificados con el oficialismo “se están comiendo el salami” que antes vendían a crédito por falta de compradores.
Rojas Gómez criticó además la falta de transparencia y coherencia en la política de combustibles del gobierno. Señaló que, pese a la promesa del presidente Abinader de ajustar los precios solo si el barril superaba los US$103, el petróleo ha estado por debajo de los US$70 durante meses y no se han aplicado las rebajas esperadas. “Hace más de dos años que los precios del petróleo están bajos, pero los combustibles siguen caros”, expresó.
En relación con la política ambiental, Rojas defendió la necesidad de aplicar una transición gradual en la regulación del uso del plástico, especialmente del foam (FOM), debido al impacto ambiental que generan estos residuos. Dijo que hubo un acuerdo con los industriales para adoptar materiales con aditivos biodegradables, pero que la reforma legislativa quedó varada en la Cámara de Diputados.
Sobre el Congreso Nacional de la Fuerza del Pueblo, explicó que el partido está actualmente en la etapa electoral interna, con procesos en marcha para elegir presidentes municipales, de circunscripción y una nueva Dirección Central. Aseguró que todo se está realizando de forma democrática y estructurada.
Al ser cuestionado por su responsabilidad en la llegada del PRM al poder, Rojas Gómez reconoció que su organización fue corresponsable de la derrota del PLD en 2020, pero sostuvo que el PRM ha resultado ser “la peor tragedia que le ha pasado a la República Dominicana”.
En temas de salud, cuestionó los logros del gobierno actual. Afirmó que no han inaugurado hospitales nuevos, sino que han continuado proyectos dejados en 95% por el PLD. Criticó también el debilitamiento de los programas esenciales del Ministerio de Salud Pública y la falta de cumplimiento de normas y protocolos.
Sobre el programa de medicamentos de alto costo, advirtió que, aunque el presupuesto ha aumentado, los precios de los fármacos también se han disparado en más de un 200%, lo que limita el impacto real del gasto. “Están comprando lo mismo con el triple del presupuesto”, denunció.
Finalmente, acusó a sectores militares y de Migración de mantener un “negocio” en la frontera con Haití, lo cual, a su juicio, es el verdadero origen del descontrol migratorio. “Nos arrepentimos de haber contribuido a que el PRM llegara al poder. Pero más que arrepentimiento, es un compromiso de rectificar y de evitar que este gobierno continúe”, concluyó.