Santo Domingo.– La Antigua Orden Nacionalista se movilizó este jueves hacia el Congreso Nacional en apoyo a las políticas migratorias del gobierno dominicano y en rechazo a proyectos legislativos que, según ellos, atentan contra la libertad de expresión y la soberanía nacional. En respuesta, las autoridades desplegaron un fuerte contingente policial en los alrededores del Palacio Legislativo, reforzado con vallas metálicas y unidades tácticas para garantizar la seguridad durante la manifestación.

Uno de los principales puntos de protesta fue la ya retirada propuesta del senador Rafael Barón Duluc, la cual buscaba penalizar el llamado “discurso de odio”. Los voceros de la Antigua Orden calificaron dicha iniciativa como una amenaza a la libre opinión de quienes defienden la identidad nacional frente a lo que consideran una creciente presión internacional para flexibilizar la política migratoria dominicana.

El movimiento expresó su respaldo absoluto a las deportaciones de haitianos en condición irregular y a cualquier medida del gobierno encaminada a proteger las fronteras. “Reclamamos respeto por nuestro derecho soberano a decidir quién entra y quién se queda en nuestro país”, señalaron sus dirigentes frente al Congreso, en medio de consignas nacionalistas y banderas ondeando al viento.

Durante la concentración, miembros de la Antigua Orden portaban pancartas con mensajes alusivos a la defensa de la patria, el fortalecimiento de los valores nacionales y el rechazo a cualquier interferencia extranjera en los asuntos internos del país. La marcha transcurrió de manera pacífica, aunque bajo una estricta vigilancia policial que incluyó drones y cámaras de seguridad instaladas en puntos estratégicos del entorno legislativo.

Los organizadores insistieron en que su movimiento no promueve la violencia ni el odio, sino la protección de los intereses nacionales ante lo que consideran una campaña sistemática para desdibujar la identidad dominicana. “No somos enemigos de ningún pueblo, pero tampoco permitiremos que se nos imponga una visión que no representa los valores de la República Dominicana”, declaró uno de los voceros al tomar la palabra ante los asistentes.

Desde el Congreso, algunos legisladores observaron la manifestación sin emitir declaraciones, mientras otros expresaron su respeto al derecho a la protesta, aunque señalaron la necesidad de equilibrar las libertades con el respeto a los derechos humanos. La jornada concluyó sin incidentes mayores, pero dejó claro que el debate sobre migración, soberanía y libertad de expresión sigue siendo uno de los temas más sensibles en el panorama político nacional.