La Semana Santa 2025 transcurre con un ambiente de recogimiento y baja movilidad en comparación con años anteriores. Este miércoles, las terminales de transporte del sur, como la ubicada en la avenida 27 de Febrero con Isabel Aguiar, mostraron un flujo tímido de vacacionistas que decidieron trasladarse a sus pueblos para compartir en familia, lejos de las tradicionales actividades recreativas.
“Este año no hay calle, estamos de luto”, expresó una pasajera que viajaba hacia Azua. Como muchos otros, asegura que dedicará estos días a la reflexión espiritual junto a sus seres queridos, en respeto a las recientes tragedias que han enlutado al país, especialmente el caso del YEP’S.
La mayoría de los viajeros coincidió en un mensaje claro: cero calle, cero alcohol y mucha oración. Algunos señalaron que la sociedad necesita una pausa para pensar en Dios y en el rumbo que lleva, calificando la situación actual del país como un llamado urgente a la introspección.
Mientras tanto, choferes de las distintas rutas reconocen que el movimiento está “flojo” y esperan que el panorama mejore este jueves después del mediodía. “Las guaguas están vacías, no hay cuarto en la calle”, comentó un conductor, resignado ante la baja demanda.
Las autoridades han reforzado las medidas preventivas y hacen un llamado a la prudencia, la calma y el respeto por la vida durante estos días santos.
La Semana Santa se extiende hasta el domingo 20 de abril, y este año, más que vacaciones, parece ser un espacio para la pausa, la memoria y la fe.



