Washington, D.C. – El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, fue recibido este lunes por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en la Casa Blanca, en una reunión oficial centrada en la cooperación bilateral en materia migratoria, seguridad regional y la posible repatriación de Kilmar Ábrego García, un ciudadano salvadoreño deportado por error por parte de EE. UU.

Este encuentro marca la segunda reunión entre ambos mandatarios —la primera fue en septiembre de 2019 durante la Asamblea General de la ONU—, pero la primera vez que Bukele es recibido en la Casa Blanca, y no en la residencia privada de Trump en Mar-a-Lago, lo que subraya la cercanía entre ambos líderes.

Bukele fue recibido con honores militares en la base aérea de Andrews, un gesto simbólico que refuerza la sólida relación entre ambos gobiernos. La Casa Blanca confirmó la visita el pasado 2 de abril y destacó la colaboración activa de El Salvador en el combate a la migración irregular y el crimen transnacional.

Según la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, los mandatarios discutieron además el uso del Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot) como modelo regional para enfrentar a organizaciones criminales como el Tren de Aragua y la MS-13. Trump elogió el liderazgo de Bukele y calificó la cooperación entre ambos países como “un ejemplo para el mundo”.

La posible repatriación de Kilmar Ábrego García también estuvo sobre la mesa, luego de que Washington admitiera públicamente que su deportación se realizó por error, generando controversia y atención mediática internacional.

Ambos presidentes reafirmaron su compromiso de seguir fortaleciendo los lazos bilaterales en favor de la estabilidad y el desarrollo de la región.