El Presidente de los Pastores del Cibao, en una declaración contundente, rechazó enérgicamente el maltrato a los haitianos en la República Dominicana, subrayando que, aunque el país enfrenta dificultades económicas, no puede cargar con el peso de otro país. Aseguró que, con una población de aproximadamente 5 millones de dominicanos, la nación no está en capacidad de asumir más cargas, a pesar de la solidaridad con los vecinos.

Aunque expresó su apoyo al presidente Luis Abinader, el líder religioso señaló que no está de acuerdo con las medidas actuales para deportar a los inmigrantes. “No puedo aceptar la forma en que se están llevando a cabo las deportaciones, usando camiones que parecen tratar a las personas como animales”, manifestó. Además, enfatizó que aunque se debe combatir la ilegalidad, también es esencial que las deportaciones se realicen de manera humana y con respeto a los derechos de las personas.

El pastor también hizo un llamado a la regularización de los haitianos que trabajan de manera legal en el país, mencionando que muchos de ellos enfrentan dificultades para renovar sus documentos y que el proceso se ha vuelto extremadamente complicado. “Es importante que se busque una solución legal y justa para estos trabajadores”, afirmó.

Por último, el Presidente de los Pastores del Cibao reiteró el rechazo de la comunidad evangélica al maltrato a los inmigrantes y expresó su preocupación por las imágenes que han circulado, las cuales, según él, son dolorosas y muestran la necesidad urgente de un enfoque más humano en la gestión migratoria.