Julio Martínez Pozo criticó con dureza el optimismo expresado por funcionarios dominicanos que buscan la eliminación de los aranceles del 10% impuestos por la administración de Donald Trump a productos dominicanos. Durante su intervención en el programa radial El Sol de la Mañana, Pozo advirtió que las negociaciones bilaterales con Estados Unidos son desiguales y que la República Dominicana no tiene ninguna posibilidad real de éxito en ese marco.

“Estamos hablando de un país que ni siquiera respeta a potencias como Japón, Corea del Sur o la Unión Europea. ¿Qué podemos esperar nosotros?”, sentenció Pozo, al tiempo que calificó como ingenuo el entusiasmo mostrado por ministros como Ito Bisonó, Jochi Vicente y el canciller Roberto Álvarez tras su visita a Washington.

Pozo sugirió que cualquier intento serio de negociar debería hacerse dentro del marco del DR-CAFTA y con el respaldo de los demás países firmantes, en lugar de abordar el conflicto desde una posición unilateral.

Además de sus críticas al panorama comercial, el periodista abordó el polémico uso de información confidencial dentro del Colegio Cardenalicio. Afirmó que existe un sistema informal conocido como el “R Report“, que contendría dosieres secretos sobre la vida privada y antecedentes de cada cardenal, incluidos elementos potencialmente comprometedores. Según Pozo, estos archivos sirven como mecanismo de presión dentro de la estructura eclesiástica.

“El manejo de información es poder. Y este tipo de reportes se usa para alinear voluntades en decisiones cruciales dentro del Vaticano”, advirtió.

En otro orden, Pozo denunció una grave contradicción entre las declaraciones del canciller Álvarez ante el Consejo de Seguridad de la ONU sobre el avance de bandas haitianas hacia la frontera y las del ministro de Defensa, quien negó que exista amenaza alguna. “El canciller habló en nombre del gobierno, pero el gobierno mismo lo desautoriza. Eso es un desorden institucional preocupante”, expresó.

Finalmente, calificó como una “burla a la ética y a la institucionalidad” la reciente designación de Emma Polanco como presidenta de la Cámara de Cuentas, institución que ahora, dijo, queda en entredicho. Exigió una auditoría internacional inmediata tanto a su gestión anterior en la OAS como a la propia Cámara, señalando que “no se puede auditar a nadie cuando tú misma no resistes una auditoría”.