Un incidente ocurrido en Charlottesville, Virginia, ha desatado controversia y protestas en la comunidad. Tres agentes se llevaron a un hombre que acababa de ser absuelto de cargos de agresión en un juzgado local, tras haber enfrentado un juicio por presuntos actos de violencia. El defensor público que representó al acusado, Nicolai Repucci, denunció que los agentes no se identificaron de ninguna manera, lo que generó dudas sobre la legalidad de la detención.
Según Repucci, el hombre, quien había sido absuelto de los cargos, fue abordado por los agentes al salir del tribunal y, sin ninguna explicación ni identificación, fue subido a una camioneta y llevado. El defensor público señaló que el comportamiento de los oficiales parecía irregular y desconcertante, ya que en ningún momento se mostró que los agentes eran parte de una autoridad legítima.
El incidente provocó una ola de indignación, y al día siguiente, decenas de personas se reunieron a las afueras del juzgado para protestar contra lo que consideraban una detención injustificada. Sin embargo, la sheriff del condado de Albemarle, quien emitió un comunicado al respecto, defendió a los agentes involucrados, asegurando que se habían identificado adecuadamente ante el oficial de seguridad del tribunal antes de llevar a cabo la detención. Además, la sheriff confirmó que otra persona fue detenida fuera de la sala del tribunal en relación con el incidente, aunque no se brindaron más detalles sobre el motivo de dicha detención. La situación sigue siendo objeto de debate en la comunidad, mientras se exigen mayores aclaraciones sobre las circunstancias que rodearon la detención.