El 13 de marzo, Shirly Guardado, madre hondureña y esposa de un militar activo en el Ejército de los Estados Unidos, fue detenida en su lugar de trabajo por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). Según el testimonio de su esposo, Ayssac Correa, los agentes le informaron que su vehículo estuvo involucrado en un accidente la noche anterior, pero él asegura que eso no fue cierto, ya que estaban en casa viendo películas en ese momento.

Este arresto ocurrió tan solo un mes después de que Guardado asistiera a una cita migratoria rutinaria, donde le habían asegurado que su caso de parole militar estaba en orden. La situación de Guardado se complica aún más debido a su vínculo con un miembro activo del ejército estadounidense, ya que ella estaba en proceso de regularizar su estatus migratorio. Además, es madre de un bebé de 10 meses y no tiene antecedentes penales.

De acuerdo con su esposo, los agentes se hicieron pasar por oficiales del Departamento de Seguridad Pública para llevar a cabo la detención. “Todavía tengo esperanza de que ella pueda salir a celebrar el primer año de nuestra hija”, expresó Correa, quien lucha para evitar la deportación de su esposa.

Guardado ingresó a los Estados Unidos siendo menor de edad y su estatus fue regularizado al contraer matrimonio con un militar estadounidense, recibiendo una aprobación para su petición de residencia en 2023. Sin embargo, expertos legales advierten sobre los riesgos que enfrentan aquellos con un estatus migratorio complicado, ya que no están exentos de ser deportados, incluso si tienen una autorización temporal para permanecer en el país.

Correa expresó su sorpresa ante la situación, señalando que nunca imaginó que su familia sería víctima de las políticas migratorias de la administración actual. “Que miren bien a las personas que están aquí, estamos tratando de vivir una vida tranquila”, agregó.

Este caso pone en evidencia las tensiones y los desafíos que enfrentan muchas familias inmigrantes en los Estados Unidos, incluso aquellas que tienen vínculos con el servicio militar estadounidense. La detención de Guardado es una muestra de la incertidumbre que muchas personas en situación migratoria irregular siguen enfrentando.