Lucio Catarino Díaz, un conserje de 53 años de Texas, se declaró culpable de un cargo de agresión agravada con un arma letal después de orinar en las botellas de agua de varias empleadas de un consultorio médico en Houston, contagiándolas de herpes. Los fiscales desestimaron otros siete cargos adicionales de agresión agravada, así como un cargo de agresión indecente.
El incidente fue descubierto en septiembre de 2022 cuando un empleado del consultorio notó un olor extraño en el dispensador de agua y comenzó a sospechar de la contaminación. En agosto, un trabajador de 54 años comenzó a beber solo de las botellas que traía de casa tras percatarse del mal olor en el dispensador. Sin embargo, en septiembre, su propia botella de agua fue contaminada con orina, lo que fue confirmado tras un análisis de orina.
El empleado, que compró una cámara espía para investigar, grabó el momento en que Díaz orinaba en las botellas de agua. Según los fiscales, los fluidos corporales de Díaz actuaron como el “arma letal” en este caso.
El conserje enfrentará consecuencias legales por sus acciones, mientras que las víctimas siguen siendo apoyadas en su proceso de recuperación.



