El comisionado para la reforma de la Policía Nacional, Luis García, destacó hoy en una entrevista con Diario Libre una alarmante cifra sobre el despliegue policial en el país: solo el 11% de los agentes están activos patrullando las calles. Esta situación subraya la necesidad urgente de una reforma estructural en la institución.
A pesar de los esfuerzos en curso para transformar la policía, la cifra refleja los desafíos persistentes que enfrenta el sistema de seguridad. García, quien se ha mostrado optimista sobre el progreso, explicó que la reforma es un proceso largo, que requiere tiempo y un compromiso sostenido. El comisionado destacó que, además de la formación intensiva de nuevos agentes, el gobierno está invirtiendo en recursos como vehículos y equipos especializados para mejorar la eficiencia de la policía en la lucha contra la criminalidad.
Sin embargo, la falta de efectivos en las calles ha generado preocupación, especialmente en áreas donde el crimen ha aumentado. La implementación de estrategias como el sistema de cuadrantes, que permitía una vigilancia más cercana a la población, también ha sido descontinuada, afectando la prevención del delito.
Además, el aumento de la inseguridad vial, especialmente entre los motoristas, ha sido otro tema crítico. La ministra de Interior y Policía, Faride Raful, ha prometido tomar medidas enérgicas para poner orden, aunque el desorden en las calles, con motoristas violando constantemente las leyes, sigue siendo una de las principales preocupaciones de los ciudadanos.
Este panorama pone de manifiesto la complejidad de la reforma policial y la necesidad de fortalecer tanto la presencia en las calles como la vigilancia en el tráfico para garantizar la seguridad de la ciudadanía.



