En una situación de creciente tensión, vecinos de una vivienda han estado a punto de llegar a un enfrentamiento físico debido a las heces de gatos que invaden su propiedad. Según declaraciones de uno de los afectados, la molestia comenzó cuando los animales, que no pertenecen a los residentes, comenzaron a defecar en su terreno. A pesar de varias quejas a los dueños de los gatos, no se ha tomado ninguna medida, lo que ha generado frustración entre los afectados.

Nosotros no tenemos animales. No es justo que se nos imponga vivir en estas condiciones”, comentó uno de los residentes. Los afectados han intentado acudir a la justicia y hacer escuchar su voz, pero aseguran que no han recibido ninguna respuesta.

La situación ha llegado a un punto crítico donde la paciencia de los vecinos se ha agotado, y la convivencia diaria se ha convertido en un verdadero dolor de cabeza. “Es intolerable, nadie nos escucha. Es necesario que las autoridades intervengan y tomen cartas en el asunto“, exigió el vecino afectado.

Este problema ha generado un ambiente de constante preocupación en la comunidad, donde muchos piden a las autoridades locales que actúen con rapidez antes de que la situación se agrave aún más.