Julio Martínez Pozo abordó la elección unánime de Yeni Berenice Reinoso como Procuradora General de la República, destacando las razones que llevaron a esta decisión y las implicaciones políticas de la misma. Martínez Pozo subrayó que, a pesar de algunos intentos del gobierno de evitarla, la elección fue inevitable debido a su fuerte aceptación tanto a nivel nacional como internacional, especialmente en Estados Unidos.
Según Pozo, la decisión de escoger a Reinoso no solo respondía a su capacidad profesional y su historial intachable, sino también a la presión externa, ya que era la opción con mayor respaldo en términos de política exterior. A pesar de que algunos en el gobierno intentaron impulsar a otros candidatos, la elección de Reinoso fue prácticamente un acto de conveniencia política, ya que no existían objeciones claras hacia su persona ni su gestión pasada.
Uno de los puntos destacados por el comentarista fue el contexto político en el que se dio la votación unánime. La oposición, al no poder cambiar los resultados de la elección, decidió respaldar su elección para evitar quedar mal ante la opinión pública, lo que reflejó una estrategia de apoyo pragmático más que una genuina alianza política. Este respaldo, aunque táctico, envió un mensaje importante al país sobre la unidad en torno a una figura clave como la Procuradora.
Además, Martínez Pozo mencionó que la llegada de Reinoso a la Procuraduría podría implicar un cambio en la dinámica política, especialmente porque el gobierno ahora tiene la oportunidad de fortalecer su mensaje en la lucha contra la corrupción y de abordar temas sensibles que podrían marcar la diferencia en las futuras elecciones.



