El comunicador y experto económico Jaime Aristy Escuder ofreció un análisis sobre las recientes fluctuaciones en la economía global, destacando los efectos de la inflación en Estados Unidos y su impacto en la República Dominicana. Escuder resaltó la estrecha relación entre las economías de ambos países, señalando que la inflación importada afecta directamente los precios locales.

Según el economista, la reciente subida de la inflación en Estados Unidos a un 3% durante enero sorprendió a los analistas, ya que superó las proyecciones previas del 2.9%. A pesar de los esfuerzos de la Reserva Federal para mantener una política monetaria restrictiva, con una tasa de interés en el rango del 4.25% al 4.5%, los precios continúan aumentando. Aristy explicó que esta inflación, sumada a factores como el mercado laboral y el mercado de bienes, ha presionado al alza los precios tanto en los Estados Unidos como en la República Dominicana.

El experto subrayó que este fenómeno económico también se refleja en la tasa de interés local, destacando que la diferencia entre la tasa de interés de referencia en ambos países es actualmente más pequeña de lo habitual, lo que podría influir en el comportamiento del mercado de divisas y los instrumentos financieros denominados en pesos. “Si no se ajustan las tasas de interés pasivas en República Dominicana, podríamos ver una mayor demanda de dólares, lo que podría presionar aún más la tasa de cambio”, advirtió.

En cuanto a las políticas de la Reserva Federal de Estados Unidos, señaló que algunos expertos creen que se cometió un error al reducir la tasa de interés en 100 puntos básicos el año pasado, ya que no existían condiciones claras para hacerlo. Según él, la falta de medidas adecuadas podría haber contribuido a la aceleración de la inflación, que se ve reflejada también en el aumento de precios en sectores específicos, como el de los huevos debido a la gripe aviar.

Aristy también resaltó la postura de Donald Trump sobre las tasas de interés, quien ha presionado para que se reduzcan, lo que ha generado tensión con la Reserva Federal, que ha dejado claro que sus decisiones se basarán en datos económicos y no en presiones externas. A pesar de los desacuerdos políticos, el economista considera que la situación económica actual obligará al Banco Central de la República Dominicana a mantener una política cautelosa, sin esperar recortes significativos en la tasa de interés hasta mediados de 2025.

Finalmente, el experto económico destacó la importancia de que el Banco Central dominicano maneje cuidadosamente estas variables internacionales para garantizar la estabilidad económica y mantener bajo control la inflación local, lo que permitirá afrontar los desafíos que puedan surgir en los próximos meses.