Iluminada Muñoz, a través de su espacio en la Z101, hizo pública una grave denuncia sobre amenazas y violencia ejercida por bandas haitianas contra los productores arroceros del nordeste del país.

Durante una rueda de prensa, el presidente de la Asociación de Productores de Arroz del Nordeste, Juan Pablo Pérez, alertó que agricultores han sido víctimas de incursiones en sus propiedades por parte de grupos organizados de ciudadanos haitianos. Según su testimonio, estos grupos han irrumpido en los campos armados con machetes, palos y varillas, exigiendo condiciones de trabajo impuestas por ellos sin negociación previa.

Muñoz, al compartir esta información con la audiencia, manifestó su sorpresa y preocupación ante la situación, instando a las autoridades a actuar con urgencia. “Esto es una locura. No podemos permitir que bandas haitianas amenacen y violenten a nuestros arroceros. El Gobierno debe tomar cartas en el asunto antes de que ocurra una tragedia“, afirmó.

Durante la rueda de prensa estuvieron presentes representantes de la Policía Nacional y autoridades de la región, pero hasta el momento no se ha emitido una respuesta oficial concreta por parte del Gobierno.

El presidente de la Asociación de Productores de Arroz del Nordeste reiteró que los arroceros temen por sus vidas y exigen una intervención inmediata para garantizar su seguridad. “Las amenazas son constantes. No es uno o dos haitianos, es una banda organizada que intenta imponer sus condiciones por la fuerza”, señaló Pérez.

Muñoz hizo un llamado directo al presidente Luis Abinader, al director general de Migración, Lia Yester, y al director general de la Policía Nacional, mayor general Ramón Antonio Guzmán Peralta, para que atiendan la situación de inmediato.

Las autoridades no pueden seguir ignorando este problema. Es hora de actuar y proteger a nuestros productores arroceros, que son una parte fundamental de la economía nacional”, concluyó Muñoz.

La comunidad espera respuestas y medidas concretas para evitar que esta situación se agrave y afecte no solo a los arroceros, sino a la seguridad del país en general.