Un intenso operativo policial se llevó a cabo la mañana de hoy en el estacionamiento de una plaza comercial de esta ciudad, luego de que transeúntes alertaran a las autoridades sobre un fuerte hedor que emanaba del baúl de un vehículo estacionado en el lugar.
Agentes del Departamento de Investigaciones Criminales (DICRIM) de la Policía Nacional se trasladaron rápidamente al sitio ante la posibilidad de que se tratara de una situación de gravedad. Sin embargo, tras la inspección del vehículo y la llegada de su propietario, se esclareció la causa del mal olor: varias extremidades de aves en estado de descomposición.
El dueño del automóvil explicó a las autoridades que las piezas de pollo habían sido recolectadas para alimentar a unos perros que posee en el campo. “Yo me imaginé que esto iba a pasar. Eso es para mis animales, tengo como cuatro perros y les cocino los restos de pollo”, declaró el hombre, quien aseguró que los alimentos habían sido guardados desde el día anterior y se habían deteriorado con el calor.
El incidente generó preocupación entre los ciudadanos y movilizó a un contingente policial, pero finalmente fue aclarado sin mayores consecuencias. Las autoridades hicieron un llamado a la población a mantener precaución con el manejo de desperdicios orgánicos para evitar situaciones similares.



