El reciente hospital traumatológico de Azúa, que ha abierto sus puertas para atender a la población de la región sur, marca un hito en la cobertura de necesidades médicas. No obstante, la presencia masiva de parturientas haitianas en hospitales del país genera una sobrecarga considerable en los recursos destinados a los dominicanos, poniendo en evidencia un desequilibrio en la atención.
En áreas como Bánica y otras franjas fronterizas, más del 65% de la población hospitalaria está compuesta por haitianos, lo que aumenta los costos y afecta la calidad del servicio. Los médicos denuncian que esta situación está impactando las estadísticas de mortalidad materna, dado que muchas de estas pacientes no reciben atención prenatal adecuada. La sobrecarga hospitalaria y la falta de recursos son una preocupación creciente que el Sistema Nacional de Salud (SNS) debe abordar.



